Alimentación y ejercicio son esenciales para la salud de las mujeres: académica

10 de mayo de 2024


Elías Quijada

Padecimientos cardiovasculares, cáncer de mama y cervicouterino son enfermedades con mayor prevalencia en la población femenil en Sonora, las cuales, con prevención, pueden disminuir sus factores de riesgos, consideró Sayil Alejandra de la Torre Othón, responsable de Internado de Pregrado en el Departamento de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad de Sonora.

En el marco del Día de las Madres, la profesora universitaria dijo que las mujeres en general pueden desarrollar varias enfermedades en el transcurso de su vida, y prácticamente se puede evitar a través de la cultura de autocuidado y de la prevención.

“Como mamás o amas de casa, la palabra ‘prevención’ se deja de atender por enfocarse a los aspectos familiares; se entiende que lo principal son los hijos, pero al final, si no se cuida la mujer y no tiene salud no tendría el espacio para la familia”, explicó.

Se deben procurar hábitos

Destacó que los puntos para los cuidados son los hábitos alimenticios y el ejercicio, este último tiene mucho impacto favorable para el sector femenil pues aumenta la carga muscular y con ello, se conserva la calidad ósea, mejora los compuestos químicos del cuerpo, tiene más salud en algunos años posteriores e incluso en las cuestiones hormonales.

También el descanso o hábitos de sueño, las visitas periódicas al médico general coadyuban para mejorar la calidad de vida de las mujeres, lo que incluye de manera rutinaria análisis sanguíneos para descartar cualquier padecimiento, así como la autoexploración mamaria y el papanicolaou.

“Todos son importantes y sirven para detectar alguna anomalía de forma temprana y poder prevenir complicaciones.

“El cáncer de mama y cervicouterino son parte de las enfermedades con mayor prevalencia, se recomienda que las mujeres al inicio de la vida sexual se empiecen hacer el papanicolaou e incluso de los 30 a 35 años se empieza con la exploración mamaria”, aseguró.

La catedrática mencionó que la forma idónea es asistir al médico general o familiar de manera periódica para consultas de control de salud, en el posible escenario existiera alguna anomalía de riesgo la ayuda es por medio de profesionales especialistas de la salud.

Hizo un llamado a las mujeres a tener más presente los cuidados preventivos y recalcó la importancia de una buena cultura de salud, pues de esa manera se ofrece mejores niveles de vida a su familia y seres queridos.