Celebran XXV Aniversario del Archivo Histórico de la Universidad de Sonora

23 de febrero de 2024


Beatriz Espinoza

Con un conversatorio y un reconocimiento póstumo a su fundador, Humberto Monteón González, se conmemoró este 23 de febrero el XXV Aniversario de la creación del Archivo Histórico de la Universidad de Sonora, hoy, Archivo General Universitario.

La subdirectora del Archivo General Universitario, Patricia Ríos García, fue quien dirigió la ceremonia en la que participaron Arturo Valencia Ramos y Enrique Fernando Velázquez Contreras, como integrantes del Consejo Consultivo del Archivo, además de Concepción Moya Grijalva y Rosalina Núñez Márquez, ex trabajadora y responsable operativa, respectivamente.

El primero en referirse a los inicios del Archivo General Universitario, que comenzó a operar el 24 de febrero de 1989, en la rectoría de Jorge Luis Ibarra Mendívil, fue Arturo Valencia Ramos, quien mencionó que, siendo estudiante de la Licenciatura en Historia, observó cómo es que la Universidad, a través de esta academia, brindaba asesoría a los municipios para la recuperación de documentos.

Fue entonces, dijo, que preguntaron qué es lo que pasaba con los archivos de la Universidad y trabajaron con el rescate de la documentación que se encontraba dispersa y/o perdida en las distintas instancias.

“Hicimos un primer estimado de documentos que era como de dos kilómetros, obviamente lineales y, a partir de ahí comenzamos”, comentó.

Mencionó que también recibieron mucho apoyo de parte del maestro José Trinidad Chávez Ortiz, quien era el entonces jefe del Departamento de Historia.

Valencia Ramos también hizo referencia a cómo se formó como historiador y luego en el área de la archivística histórica, además del trabajo que realizaron por años para concretar las funciones del Archivo, de la mano de la Secretaría General Académica.

“El trabajo de archivo es un esfuerzo conjunto, no es trabajo de una sola persona y eso es algo que también nos inculcó el doctor Monteón; no es un asunto personal y mucho menos en los archivos institucionales del trabajo”, expresó el miembro del primer equipo de trabajo, junto con tres mujeres y Monteón González.

Es necesario fortalecerlo

Enrique Fernando Velázquez Contreras, ex rector y también integrante del Consejo Consultivo, participó en el conversatorio, él abordó los temas de la importancia del Archivo Histórico de la Universidad de Sonora, porqué depende de la Secretaría General Administrativa ahora y porqué el cambio de nombre.

Asimismo, habló del periodo en el que, siendo Secretario General Académico, le tocó apoyar la creación del Archivo y propuso algunas acciones para mejorar el servicio y funcionamiento de esta instancia universitaria que es ejemplo a nivel nacional.

Describió cómo es que, con la aparición de la Ley General de Archivos en México, se acabaron las discusiones de a dónde debería pertenecer, cuando el enfoque que tenía era hacia la parte administrativa y no meramente académica.

Sin embargo, consideró que el valor académico del ahora Archivo General Universitario se puede seguir discutiendo para darle apertura a otras opciones de estudios como sería de las universidades. “Ahora es un cumplimiento legal, es una obligación de las instituciones en lo que se refiere a la transparencia y a la rendición de cuentas”.

Consideró que hace falta fortalecer al Archivo en los aspectos de la memoria histórica de la Universidad, en los departamentos, además de impulsarlo en lo referente a la tecnología para la recopilación de la información.

Documentos con carácter histórico más buscados

Concepción Moya Grijalva, jubilada y ex encargada del área de concentración, recordó cómo fueron las primeras reuniones y cómo convirtieron el restaurante del Navarrete y Luis Encinas en la primera oficina y donde comenzaron a trabajar conducidos por Humberto Monteón con unas 70 cajas de documentos de los inicios de la Universidad.

Después habló de los espacios que fueron adquiriendo, de los muros que se derribaron y del trabajo que realizaban en el piso. “Ahí empezó el área de concentración, con estanterías que otros desechaban, que otras personas no necesitaban”, comentó.

Orgullosa dijo que el Archivo Histórico de la Universidad de Sonora es ejemplo a nivel nacional y una referencia en la cuestión archivística. “El archivo está reconocido por nuestros colegas de la Red Nacional de Archivos de Instituciones de Educación Superior como uno de los mejores a nivel nacional”.

Archivo de concentración y también de donaciones

Rosalina Núñez Márquez, responsable operativa del Archivo General Universitario, abundó sobre las funciones que tiene actualmente esta instancia universitaria y de las principales colecciones con las que se cuentan, entre otros aspectos.

Resaltó la importancia que ha tenido la convocatoria de donación de documentos por parte de la sociedad en general con los que se han formado colecciones importantes y fondos documentales que son de consulta pública.

“Otra de las cosas que nosotros hacemos aquí en el Archivo Histórico es difundir el patrimonio documental a través de las visitas guiadas, de los documentos del mes que ahorita se están haciendo de manera virtual”, explicó, además de la conservación y la recepción de materiales.

Dijo que, actualmente, se tienen 58 fondos universitarios incorporados y 25 colecciones documentales universitarias con fechas desde 1881 a 2018 que son 887 cajas y significa 357.75 metros lineales.

Agradece reconocimiento

Luego del conversatorio, Enrique Fernando Velázquez Contreras fue quien entregó a Humberto Monteón, hijo del fundador, el reconocimiento póstumo para su padre, por su aportación a la creación de este recinto universitario.

Al recibir el documento firmado por el secretario General Administrativo, Enrique Riojas Duarte, Humberto Monteón hijo, expresó su agradecimiento a nombre de su madre, su hermana, de los nietos y suyo a las autoridades universitarias por esta deferencia a su señor padre.

Refirió a la tarea realizada por Monteón González como una contundencia histórica el interés no sólo de recuperar, sino de clasificar la documentación que nos hace articular cualquier situación para poder entender nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro.

Añadió que la familia iniciará con los trámites para donar a la Universidad de Sonora, al Archivo General Universitario, el acervo bibliográfico de su padre Humberto Monteón, que consta de alrededor de 500 títulos.