Gran ambiente en la comunidad universitaria durante el México-Polonia

22 de noviembre de 2022


Jesús Alberto Rubio

Ambientazo en todo su esplendor, con muy alto porcentaje de adrenalina permeado de emociones, nerviosismo, gritos, loas y una total entrega al juego, manifestó esta mañana la enorme cantidad de estudiantes universitarios que disfrutaron de principio a fin el choque entre México y Polonia en la Copa Mundial de Futbol que se escenifica desde el pasado domingo en Quatar.

El empate a cero goles y el alto nivel competitivo entre ambas escuadras, fue la argumentación suficiente para levantar el ánimo y las expectativas en torno al representativo nacional.

Sin embargo, y hay que anotarlo con signos de relevancia, durante el desarrollo del choque hubo un momento del todo especial que movió y expresó una gran elocuencia:
¡Qué instante!

Exactamente, el éxtasis del juego se presentó cuando el portero mexicano Guillermo Ochoa paró un penalti de Robert Lewandowski que le daría la ventaja de 1-0 a los polacos, lo que finalmente gracias a la formidable atajada del mexicano nunca llegó para el beneplácito total de los concurrentes en la Plaza del Estudiante de esta casa de estudios.

Ese tipo de penal del capitán y estrella de Polonia y del Barcelona al lado izquierdo de Ochoa ocurrió a los 58 minutos del gran partido que envolvió a todos los presentes por más poco más de los 90 minutos del encuentro.

Tras la enorme atajada de oro del portero azteca, ¡cuántos coros de ¡Ochoa, Ochoa, Ochoa! se escucharon dentro del estadio y en nuestro escenario universitario.

Incluso segundos antes de que el polaco arremetiera tratando de darle la ventaja a su equipo.

¡Qué momento de fervor hacia el portero mexicano!

La atajada de Guillermo Ochoa pasa a la historia como la segunda que se ve en un equipo mexicano en la historia de las Copas del Mundo; antes, en Uruguay 1930, en el primer Mundial que se celebró, lográndolo el recordado Oscar Bonfiglio ante Argentina.

Gran emotividad
El notable evento deportivo tuvo múltiples expresiones de grata convivencia universitaria, abierta y una asistencia-participación por demás emotiva e incluyente.

Ese enorme ambiente y emotividad estudiantil se manifestó con suma satisfacción del disfrute del juego matutino durante los primeros 45 minutos, el intermedio --con las clásicas olas y loas de los y las estudiantes presentes---, y en especial la segunda parte donde el equipo nacional prácticamente dominó el encuentro… aunque finalmente tras varios intentos quedara pendiente la anotación que pudo haberle dado la primera gran victoria de la presente Copa Mundial.

Ahora, tras mostrar ante Polonia un excelente nivel de juego competitivo, México esperará el sábado para enfrentar a unos argentinos que horas antes fueron dramáticamente sorprendidos (2-1) por Arabia Saudita con todo y que habían sido marcados grandes favoritos para iniciar con su primer triunfo en esta confrontación futbolística.

El próximo juego que se podrá disfrutar en la Plaza del Estudiante será el miércoles 30 de noviembre, en punto de las 12:00 horas. Sin duda alguna, este será, de nueva cuenta, un motivo de unión más de la comunidad universitaria, que, mediante el balompié, reforzará su identidad y su amor por México.

La expectativa para nuestra selección tricolor está más que vigente y a la espera de la victoria… ¡por supuesto!