La Tierra vive el cambio climático más severo en su historia: experto de la NASA

8 de noviembre de 2022


Elías Quijada

La tierra tiene 4.5 billones de años y, a lo largo de su historia, ha registrado cambios en el clima debido a causas naturales como pequeñas variaciones en la órbita de la tierra, erupciones volcánicas, entre otras, pero el cambio climático actual se debe al calentamiento global antropométrico y es debido a la liberación de grandes cantidades de gases de efecto de invernadero por parte de los humanos a la atmósfera.

Así lo comentó Edil Antonio Sepúlveda Carlo, científico investigador senior de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, más conocida como NASA, durante la conferencia magistral Monitoreando el cambio climático y los desastres naturales desde el espacio, actividad programada en la XIX Semana Cultural Divisional de Ingeniería.

En su presentación, abordó varios temas como los conceptos básicos del cambio climático, la perspectiva global de los impactos y las proyecciones, el cambio climático en América Latina y en México, y cómo se estudia el cambio climático en la NASA, el monitoreo de los desastres desde el espacio, la visualización de 5 videos cortos sobre el impacto del cambio climático en la tierra y para concluir una sesión de preguntas y respuestas.


A causa de los seres humanos
Durante la conferencia que se llevó a cabo de manera virtual, dijo que en la historia del planeta se ha tenido cambios climáticos naturales, pero los cambios bruscos que registra la tierra en la actualidad se deben al calentamiento global antropométrico, es decir, causado por el hombre con la liberación de grandes cantidades de gases de efecto de invernadero a la atmósfera como el dióxido de carbono, el metano, el monóxido de carbono, entre otros, que trabajan como un invernadero.

Entonces, los gases atrapan el calor que se escapa al espacio, provocando un efecto inverso en el planeta, lo que produce un aumento de las temperaturas de la tierra y de los océanos, ocasionando entonces el derretimiento de hielo marino y la fusión de los glaciares.

Bien importante resaltar que existe un consenso abrumador entre la comunidad científica, más del 97% de la comunidad intelectual está de acuerdo de que el calentamiento del sistema climático es inequívoco y que es resultado de la actividad humana. También existen datos los niveles altos del dióxido de carbono desde la Revolución Industrial y en particular desde mediados del siglo pasado.

Por lo que se puede asegurar que existe una fuerte correlación entre mayores cantidades de dióxido de carbono en la atmósfera, vamos a tener temperaturas más altas a causa de los niveles de gases de efecto invernadero y va en aumento en cada década.

Mencionó que los impactos del cambio climático se observan en los ecosistemas y sistemas humanos en todo el mundo, pero presentan un impacto desigual en las regiones y en los pueblos, con considerables limitaciones de desarrollo, entre ellas la mega región de América Latina.

“La tendencia del calentamiento global a largo plazo se atribuye a las actividades humanas y algo bien importante es que la tierra ya está viendo los impactos del cambio a través de la reducción del hielo marino, el aumento del nivel del mar, la acidez de los océanos, la erosión, entre otros. En resumen, el cambio climático global no es un problema futuro, sino que es el mayor desafío de la humanidad en este momento y debe ubicarse en el centro de todo tipo de agenda”, aseveró.

Sostuvo que el derretimiento de los glaciales en Groenlandia, Himalaya, Cordilleras de los Andes entre otras regiones en las próximas décadas va a poner en riesgo las zonas costeras alrededor del planeta y contribuirá a la presencia de huracanes más intensos y frecuentes, debido a la acidificación del océano por las altas temperaturas en el agua, lo que poco a poco va matando muchos de los ecosistemas como los arrecifes coralinos.

En América Latina y el Caribe, en las últimas décadas, en especial desde el 2017 con el huracán Irma de categoría 5 afectó gravemente la Isla de Barbuda y Cuba, tiempo después, en el mismo año, otro fenómeno natural embistió a la Isla de Dominica y causó más de 3,000 muertes en Puerto Rico y originó el corte de energía más largo en la historia de los Estados Unidos y el segundo más largo en la historia en el mundo entero.

Posteriormente el huracán Dorian, mucho más reciente en el 2019, fue el sistema más fuerte que haya tocado tierra en el Atlántico y afectó el área del norte de las Bahamas, causando más de 3,000 millones de dólares en daños.

Enfocándose en la vulnerabilidad climática en América Latina incluyendo el área de México y el Caribe, en conjunto representan menos del 10% de las emisiones globales anuales de gases de efecto de invernadero y la mayoría de sus contribuciones provienen del sector energético, la agricultura y el cambio de uso de la tierra, pero debido a su mayor exposición a eventos extremos, la región está experimentando la peor parte de las emisiones de los mayores contaminantes en el mundo, apuntó.

“Los eventos climáticos extremos, tanto ciclones tropicales e inundaciones amenazan la infraestructura de transporte, energía y agua de los países, el sector de turismo costero está en riesgo, pero también es por el aumento en el nivel del mar y en las zonas rurales, las temperaturas extremas y las precipitaciones irregulares se espera que afecten drásticamente tanto a los cultivos como al ganado”, reveló.

Destaca investigaciones
El experto en ciencias climáticas con concentración de energía y política ambiental destacó algunas líneas de investigación que se desarrollan en la NASA, entre ellas, una colaboración con la Agencia Espacial de la India que va a medir los ecosistemas de la tierra a una resolución nunca antes vista y que va a ayudar a comprender mejor los cambios que están habiendo en la superficie del planeta y en las masas de hielo y va a proporcionar información muy importante sobre la biomasa, los peligros naturales, el aumento del nivel del mar, las aguas subterráneas, entre otras.

“Otra misión será para principios del 2024 y que tiene mucho interés porque será un satélite geoestacionario sobre el continente de América que va a estar midiendo específicamente para América del Norte, América Central, América del Sur, las concentraciones de gases de invernadero claves, incluyendo dióxido de carbono, metano y monóxido de carbono, entre otros”, externó.

Para concluir, invitó a estudiantes y profesores que se dieron cita a la reunión virtual acceder a la página carbon.nasa.gov para conocer sobre los programas de monitoreo de carbono de la NASA.