Para un corazón sano, mejores hábitos: especialistas de la salud
29 de septiembre de 2022
Jesús Alberto RubioEn el Día Mundial del Corazón, que se celebra el día 29 de septiembre, es importante recordar las recomendaciones generales que todos debemos de seguir para fomentar la salud y evitar las enfermedades cardiovasculares, las cuales alarmantemente afectan a un gran porcentaje de la población sonorense en nuestros días, afirmó Ilse Guadalupe Solano Cuevas, responsable del Programa de Salud Estudiantil de la Dirección de Apoyo a Estudiantes de la Universidad de Sonora.
Junto con Vianey Aguilera Barriga, quien actualmente realiza su servicio social de Medicina dentro del Programa de Salud Estudiantil a su cargo, dijo que es por ello que en esta fecha se hace hincapié a responder al llamado de realizar cambios en nuestros hábitos, de manera que pueda fomentarse la cultura preventiva y así otorgarnos a cada uno de nosotros la oportunidad de tener una mejor calidad de vida.
Solano Cuevas señaló que para muchas personas hablar de la salud del corazón es hacer énfasis en no tener presente ningún diagnóstico de enfermedades cardíacas o hipertensión, pero hay mucho más detrás de un corazón sano.
“Para hablar de la salud en el corazón es necesario mantener los cuidados constantes en nuestro cuerpo, como la alimentación, la cual es importante recordar que debe de ser baja en grasas, comidas procesadas y azúcares, especialmente los refinados”, subrayó.
Indicó que se deben mantener las porciones adecuadas para cada uno de nosotros según nuestra actividad diaria y necesidades físicas, así como manejar tres comidas al día y dos colaciones pequeñas, disminuir la ingesta de sal y comidas rápidas.
Todo inicia desde la niñez
Solano Cuevas y Aguilar Barriga afirmaron que el cuidado del corazón comienza desde la niñez al momento de que el infante recibe la lactancia materna y, posteriormente, con el desarrollo de correctos hábitos alimenticios fomentando la ingesta de frutas y verduras.
“Se trata de que con ello se prevenga el crecimiento de un niño con obesidad y que más adelante sea un candidato directo al desarrollo de enfermedades crónico degenerativas y problemas cardíacos”, advirtieron.
Ambas entrevistadas expresaron su preocupación por esta situación, de la que nuestra entidad no es la excepción, ya que se encuentra entre los primeros lugares de obesidad infantil a nivel nacional.
Ilse Guadalupe Solano y Vianey Aguilera comentaron que para el cuidado del corazón es necesario recordar la importancia de realizar actividad física diariamente, la cual debe de ser de un mínimo de 30 minutos.
“Si una persona es sedentaria, aumenta sus probabilidades de desarrollar una enfermedad crónica a muy temprana edad, por lo que se le recomienda la caminata a paso constante de manera inicial e ir aumentando poco a poco”, indicaron.
Urgen cambios de estilos de vida
Consideraron que, si todos siguiéramos una alimentación sana y practicáramos ejercicio con regularidad, estaríamos dando unos pasos claves para que las enfermedades cardiovasculares dejen de ser la primera causa de muerte en el mundo.
Dijeron que las medidas anteriores constantemente son expuestas y recordadas a la población, pero por desgracia son pocas las personas que verdaderamente cambian su estilo de vida por uno más saludable.
En lo general, hicieron hincapié que no se debe dejar de lado cómo existen muchas causas que agravan la enfermedad cardiovascular, sea por factores como el tabaquismo, la diabetes, la presión arterial alta y la obesidad, entre otras patologías o múltiples factores, como la contaminación ambiental.
Es por ello, plantearon, que en el Día Mundial del Corazón es necesario tomar conciencia de tener una cultura preventiva para lograr y mantener una mejor calidad de vida, recordando además que cada año esta fecha se centra en un lema, y que en este 2022 es el siguiente: “Usa el corazón para cada corazón”.
Destacaron que el Día Mundial del Corazón se celebra el 29 de septiembre y que se hace desde que en el año 2000 la Federación Mundial del Corazón, con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo designó con el objetivo de concienciar sobre las enfermedades cardiovasculares, su prevención, control y tratamiento.
