Galardón a egresada de Ingeniería Química con el premio 40 Under 40 de Products Finishing

27 de mayo de 2021


Elías Quijada

La preparación académica que adquirió durante su estancia en la Universidad de Sonora permitió que Ana Ruth Valenzuela, egresada de programa educativo de Ingeniería Química, fuera reconocida con el premio 40 Under 40 de Products Finishing, el cual galardona a personas que poseen gran liderazgo potencial en la industria del acabado de superficie.

La egresada de la alma mater, generación 2009-2013, señaló que cada año la revista Product Finishing, en Tempe, Arizona y el comité integrado por editores examinan una larga lista de nominados con una amplia gama de habilidades; los destinatarios se eligen en función del liderazgo y la participación de la transformación; este reconocimiento se obtiene dentro de la industria de platinado “recubrimientos metálicos”, y se entrega con base en la experiencia, trayectoria e impacto que ha tenido el individuo dentro del área.

La convocatoria para participar en el certamen se cerró el pasado 1 de febrero y los resultados fueron publicados a finales del mes de abril; los nominados fueron personas menores de 40 años que están marcando una diferencia en los acabados, tanto en la empresa donde se desarrollan profesionalmente, como en la comunidad que conforma dicha industria.

“Como su nombre lo indica, Products Finishing seleccionó a 40 personas de las nominadas para su generación 2021; el énfasis del programa está en el liderazgo y el potencial de liderazgo, ya sea para un empleador actual o para la participación general en la empresa, los candidatos se caracterizan por ser líderes potenciales y pioneros”, explicó.

Expresó que este reconocimiento es de gran relevancia para su vida profesional porque es una meta cumplida, donde se refleja compromiso y responsabilidad, valores que se ponen en práctica todos los días durante las jornadas de trabajo.

En entrevista, Ana Ruth Valenzuela aseguró que el programa de Ingeniería Química de la Universidad de Sonora le dio las bases para entender el proceso desde el punto electroquímico y, además, la formó profesionalmente; agradeció a la planta docente, que aportó con su conocimiento para que el propósito se llevara a cabo: el ser capacitada con una educación de alta calidad y pertinente con el contexto mundial.

Los maestros y su aporte de conocimientos

Narró que ingresó a la máxima casa de estudios del estado en el año de 2009, y el primer profesor que marcó su paso por la institución fue José Luis García, con quien tuvo la oportunidad de llevar la clase de Introducción a la Ingeniería Química. “En esta clase tuvimos la oportunidad de ver un poco lo que es ingeniería en la industria, ya que el maestro tiene experiencia laboral fuera del sistema educativo, lo cual creo fielmente que es importante para el desarrollo del alumno”, aseguró.

Comentó que después de adentrarse a la ingeniería química, la clase de Balance de materia y energía fue una de las más retadoras, ahí adquirió una de las herramientas importantes para los procesos industriales, ya que cuenta con los fundamentos teóricos y prácticos que son básicos en cualquier transformación en la vida real.

“También el maestro que ha marcado no solamente mi trayectoria en la Universidad sino en mi vida, es mi mentor, mi papá, el profesor Alejandro Valenzuela Soto, con el cual estoy increíblemente agradecida por el apoyo y su amor incondicional”, mencionó emocionada.

Al ir recordando más sobre su paso por la institución, indicó que la mayoría de los docentes con quien tuvo el privilegio de tener contacto aportaron conocimientos y consejos para tener éxito en el mundo laboral, entre ellos Martín Encinas, excelente académico, impartiendo sus clases y la manera tan detallada de hizo comprender el mundo de la ingeniería; Abraham Martín, con el ímpetu y aquella emoción que impartía cada clase como si fuera la primera vez.

Manuel Balcázar, inolvidable todo el conocimiento que transmitió durante sus clases con una amplia trayectoria; mi asesor de tesis de la licenciatura, Armando Lucero, de él adquirí la inquietud de experimentar y realizar cosas que nunca nadie ha hecho, y por último el maestro Leobardo Valenzuela, quien cuenta con amplia experiencia en la industria minera y motiva a cada uno de sus alumnos a conocer esta industria, puntualizó.

Trayectoria laboral

La joven sonorense actualmente trabaja como gerente de Ingeniería de Platinado para Foresight Finishing, en donde está a cargo del proceso de cuatro líneas de platinado, de oro, plata, níquel, paladio, cobre sobre materiales base de cobre y sus aleaciones, así como de acero inoxidable.

“Estar a cargo del proceso significa diseño del proceso, desde que el tanque inicia hasta donde termina, definiendo parámetros de proceso, como tiempo de residencia, densidad de corriente y fixture necesario para procesar el material. Además del proceso también estoy a cargo del laboratorio donde se analiza la química de cada tanque de platinado: cada tanque contiene parámetros que se tienen que monitorear para poder llevar a cabo un proceso de platinado adecuado, como lo son pH, concentración del metal, tensión superficial, análisis de componentes, concentración de contaminantes, entre otros”, expuso.

Recordó que sus primeras ofertas de trabajo fueron en México a través de empresas norteamericanas, TE Connectivity, por tres años, y en Carlisle Interconnect Technologies, por dos años, y laborando en ésta última empresa no había muchos ingenieros en el área de platinado, por lo cual decidieron darle la oportunidad de trabajar un año en El Segundo, California, y fue cuando se efectuó su primera introducción en el mercado norteamericano.

“Regresé a trabajar a México con la misma empresa Carlisle Interconnect Technologies, y al poco tiempo recibí la oferta de Foresight Finishing que no pude rechazar, debido al reto y crecimiento económico que representaba al mismo tiempo. Ellos me contactaron y básicamente fue muy sencillo el proceso de contratación”, describió.

Como egresada de la Universidad de Sonora, manifestó que el plan de estudios que cursó presentaba características excelentes porque adquirió conocimientos, pero para enriquecer cualquier programación curricular se puede introducir a los estudiantes con la industria, a través de proyectos en conjunto durante las clases o bien contar con una planta académica con experiencia en el sector de transformación.

En su mensaje a las nuevas generaciones, subrayó que aprovechen cada uno de sus años en la Universidad, pues la tranquilidad y el relax que tienen cuando son estudiantes nunca más lo van a volver a sentir en la industria. “Aprendan lo más que puedan de cada una de sus clases, pregunten, utilicen a sus recursos que son sus maestros, ya que cuando estén en el ambiente laboral no van a tener que batallar buscando información. Si en verdad te dedicas a alguna profesión relacionada a la ingeniería química, cada una de las clases son necesarias”, finalizó.