Cacei utiliza parámetros internacionales en acreditaciones a programas educativos

17 de octubre de 2020


Elías Quijada

La evaluación externa es parte fundamental de los procesos de mejora continua de las instituciones de educación superior, y como beneficio se obtiene un reconocimiento social, prestigio académico, formación de egresados con alto capital humano y facilidad para celebrar convenios de colaboración con otros centros de estudios nacionales y del extranjero, aseguró José Arnoldo González Ortiz, coordinador general de la multivisita de evaluadores del Consejo de Acreditación de la Enseñanza de la Ingeniería, A. C., (Cacei).

Al ser entrevistado durante el proceso de evaluación con fines de acreditación a las licenciaturas de Geología e ingenierías en Mecatrónica, Industrial y de Sistemas, Civil y de Tecnología Electrónica de la Universidad de Sonora, González Ortiz señaló que una evaluación externa es un ejercicio al que se someten de manera voluntaria las instituciones públicas y privadas que desean mejorar sus indicadores, y se hace a través de comités acreditadores integrados por docentes de otras universidades, quienes brindan un diagnóstico objetivo de la calidad educativa.

El trabajo desempeñado por los evaluadores invitados se basa en el Marco Referencial 2018 del Cacei, documento que posee lineamientos internacionales, el cual consiste en dos etapas: primero se toma como punto de salida la información brindada por la Universidad, que es una autoevaluación, después se realiza una visita, pero por motivos de la pandemia de la covid-19, en esta ocasión fue a distancia, y se utilizó tecnología de la comunicación para obtener evidencia de calidad en cada categoría e indicadores.

En este caso, en la Universidad de Sonora se entrevistó al rector Enrique Fernando Velázquez Contreras, y a Martín Antonio Encinas Romero, Rodrigo Meléndrez Amavizca, directores de las divisiones de Ingeniería y Ciencias Exactas y Naturales, respectivamente, así como a jefes de departamento, coordinadores de programas, profesores, estudiantes, egresados, empleadores y áreas de apoyo, a través de plataformas digitales.

“La autoevaluación conforma fotografías, videos, se recibe archivos Microsoft, ligas de páginas institucionales y de servicios que ofrecen; en una segunda etapa vienen las entrevistas, que permiten interactuar con las personas interesadas en una evaluación para fines de acreditación o reacreditación de sus programas académicos”, explicó.

Agregó que también se hacen transmisiones en vivo de laboratorios, aulas, centros de cómputos, áreas deportivas y culturales de las propias unidades académicas, cuyo objetivo es tener una evaluación objetiva de los espacios educativos, pues “el trabajo que realizamos tiene como referencia un enfoque y reconocimiento internacional, apegado siempre a los lineamientos de Cacei”, abundó.

Coadyuvar a la calidad de la enseñanza

El trabajo de Cacei tiene como propósito coadyuvar a la calidad de la enseñanza en ingeniería, motivo por el cual la acreditación es un proceso garante de dicho aspecto y de la pertinencia de los programas educativos, pues se busca que los programas evaluados cumplan con determinados estándares.

González Ortiz indicó que los seis criterios de análisis son: Personal académico, Estudiantes, Plan de estudios, Valoración y mejora continua, Soporte institucional e Infraestructura y equipamiento; mientras que algunos de los 30 indicadores se refieren a servicios institucionales, pertinencia, recursos financieros, personal de apoyo, valoración de índices de rendimiento escolar, evaluación y logro de los atributos del egresado, flexibilidad curricular, congruencia entre los objetivos educacionales del programa educativo y la misión de la institución, entre otros.

Reiteró que las evaluaciones externas son fundamentales en todo aquello que se requiere mejorar, aunque las autoevaluaciones pueden ofrecer información objetiva, pero siempre se apoyarán en sus fortalezas y no en las áreas donde hay que trabajar para fortalecer los indicadores rezagados.

“Cacei es evaluador, y tiene como aval al Consejo para la Acreditación de la Educación Superior, A.C. (Copaes), es un organismo nacional para evaluadores de ingeniería. Los parámetros que se utiliza en Cacei están basados a partir del 2018 y son con lineamientos de la Accreditation Board for Engineering and Technology (ABET), de Estados Unidos, y el Canadian Engineers Accreditation Board (CEAB), de Canadá… entonces, todos los programas acreditados tienen atributos internacionales”, afirmó.

El también secretario de Planeación de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí mencionó que dichos atributos son producto de un consenso entre organismos extranjeros y radican en experiencias en el campo laboral de los ingenieros, y son adjetivos considerados necesarios para que un egresado se pueda desempeñar en cualquier parte del mundo.

“Debe entender y formular soluciones a problemas complejos, debe tener una altísima capacidad de comunicación oral y escrita, habilidad para trabajar en equipo e interactuar con profesionales de otras disciplinas y dominio del idioma inglés; entre otros atributos, son los que debe de poseer un egresado de programas acreditados”, aseveró.

Los jóvenes egresados de las áreas de ingeniería también deben aportar significativamente al desarrollo de la sociedad, visión que adquiere mayor relevancia en el contexto actual, dominado por profundos cambios sociales, políticos y económicos, y en este sentido, el ámbito educativo no es la excepción.

Un programa acreditado por organismos externos ofrece a los estudiantes altos niveles académicos competitivos

El coordinador general de la multivisita de evaluadores del Cacei manifestó que el poseer un programa educativo acreditado por organismos externos ofrece seguridad a los estudiantes que están siendo formados con los más altos niveles académicos competitivos; mientras que a los padres de familia se puede traducir en que sus hijos están en una institución seria, responsable con una misión y visión clara.

“También incluye a los empleadores: pueden tener la seguridad que los egresados tienen atributos y competencias para lograr objetivos en la solución de problemas que enfrenta el sector social y productivo”, sostuvo.

Referente a las comisiones encargadas de la Universidad de Sonora para sobrellevar el proceso de evaluación, expuso que se han encontrado con una extraordinaria disposición por parte de los académicos anfitriones para poder realizar una valoración pertinente y poder emitir un resultado objetivo.

“Tener las facilidades para poder realizar una evaluación es mucha ganancia, y si se abona a que al inicio de la visita se contó con la presencia del rector, pues el proceso se hace más significativo”, declaró.

En cuestión de resultados, reveló que los docentes representantes del organismo visitador se basan en un documento llamado Rúbrica, el cual contiene orientación clara para emitir una conclusión y poder dictaminar cada uno de los indicadores, dicho escrito ostenta cuatro niveles: Evaluación muy buena; Buena, pero con riesgo; Cumplimiento parcial y Totalmente deficiente.

Especificó que el primer resultado se da a conocer a los coordinadores de los programas al día siguiente que concluye el proceso de evaluación. Es un resultado preliminar, si se considera que algo no está de acuerdo con el dictamen y conforme a las evidencias presentadas, se puede hacer una solicitud de revisión de los indicadores en mención; posteriormente, el comité tiene que hacer una exploración en un periodo de siete días para dar un resultado definitivo.

“Si después de los siete días el resultado no es satisfactorio para la institución, se tiene la posibilidad de apelar a través de un proceso de réplica. Dicho proceso tiene una duración de dos a tres meses, donde un comité especial, llamado Comité de Réplica de Cacei, atiende la solicitud y da la resolución definitiva”, subrayó

Puntualizó que puede haber acreditación para tres y cinco años. Para el periodo de tres años es únicamente cuando se la institución tiene que dar cumplimiento a algunas recomendaciones importantes de forma inmediata; mientras que los cinco años es la distinción máxima que se otorga a un programa educativo con indicadores sobresalientes.

“Si al concluir los tres años demuestra la Universidad que atendió esas recomendaciones, se le amplia la acreditación a cinco años; si no, se le cancela en ese momento y debe de esperar un tiempo para solicitar un nuevo proceso de acreditación”, concluyó.