Patricia Isabel Torres Chávez : Profesora Investigadora Honoraria

“Para un profesor es muy difícil jubilarse porque el trabajo del académico es muy enriquecedor, satisfactorio y presenta muchos retos; no es fácil tomar esa decisión; por eso, tener la oportunidad de contribuir un poco más de tiempo es un buen incentivo para los docentes”

Por: Aleyda Gutiérrez Guerrero

Lo anterior lo señaló Patricia Isabel Torres Chávez, académica jubilada de la Universidad de Sonora a quien se le otorgó el nombramiento como Profesora Investigadora Honoraria, por acuerdo del Colegio Académico, en la sesión del pasado 12 de septiembre.

Después de 38 años en esta institución y jubilada desde marzo del presente año del Departamento de Investigación y Posgrado en Alimentos (DIPA), ahora continuará vinculada a esta casa de estudios a través de distintas actividades.

La docente egresada de la Licenciatura en Química, con especialidad en Alimentos, de la Universidad de Sonora, también cuenta con estudios de Maestría, que realizó en la Universidad de Texas A&M, y el Doctorado en Ciencias de los Alimentos, con especialidad en Bioquímica de Proteínas, que cursó en el Centro de Investigación en Alimentos y Desarrollo (CIAD).

Contó que su carrera en la docencia no comenzó en la Universidad de Sonora, sino en el Colegio de Bachilleres de Ciudad Obregón, donde trabajó dos años, pero durante ese tiempo tuvo la oportunidad de convivir con un grupo de maestros muy dedicados a su trabajo, realmente comprometidos con su labor, lo que la marcó de manera positiva para continuar con esta noble tarea.

Por cuestiones familiares, más adelante se trasladó de Cajeme a Puerto Peñasco y comenzó a trabajar en la Unidad Experimental Peñasco, en el cultivo de camarón, donde laboró otros dos años.

“Cuando se cerró la Unidad Experimental Peñasco, se presentó la oportunidad de trabajar en la  Universidad, en Hermosillo,  con el doctor Sánchez Lucero en el Departamento, que en ese tiempo era el Centro Coordinador de la Investigación en Alimentos, y después se convirtió en el Departamento de Investigación y Posgrado en Alimentos ”, platicó.

Su trabajo en la ciencia de los alimentos

Torres Chávez ingresó a la Universidad de Sonora en 1970 para estudiar química, pero su gusto por algunos temas y materias la fueron llevando a la especialidad. Es en la ciencia de los alimentos en lo que ha centrado su investigación y ha hecho diferentes aportes.

“Primero junto con colaboradores realicé investigación en microbiología y micotoxinas en granos, y de estos proyectos iniciales surgieron líneas de investigación que en estos momentos se desarrollan en el Departamento, incluso uno de los laboratorios más productivos actualmente es precisamente el de microbiología y micotoxinas.

 “Cuando terminé el doctorado, continué desarrollando las líneas de investigación abordadas durante los estudios de posgrado, investigación en química de los cereales, ahí me tocó estudiar carbohidratos, proteínas, polisacáridos y cómo se relaciona la fisicoquímica de esos componentes con la funcionalidad en los alimentos”, resaltó.

“Mi trabajo más reciente es el aprovechamiento de los componentes de los materiales lignocelulósicos de residuos agrícolas, en donde se incluye el estudio de sus componentes como la lignina y la celulosa”, explicó.

Al culminar el proceso de su jubilación en el mes de marzo, con el apoyo del Jefe del Departamento y del Director de la División de Ciencias Biológicas y de la Salud, participó en la convocatoria para recibir el nombramiento de Profesora Investigadora Honoraria.

Informó que hay un plan de trabajo que tendrá que cumplir, en el cual se incluyen dirección de tesis de posgrado, publicación de artículos científicos y participación en un proyecto de investigación, así como colaboración en comités de tesis que tiene pendientes, pero aclaró que parte de este trabajo ya está avanzado y tendrá la oportunidad de terminarlo.

Creció con el DIPA

La hija de padre trabajador en una mina y madre dedicada al hogar estudió hasta la preparatoria en su natal Cananea; después, vino a Hermosillo para convertirse en profesionista, pero no se quedó ahí, logró destacar como académica y formar una familia.

Se mostró agradecida porque la Universidad de Sonora, con los programas de superación académica que tiene, sumados a los del sindicato, le permitió crecer y lograr estudiar su maestría y doctorado, así como participar en la formación de nuevos profesionistas, con algunos de ellos más de cerca, al apoyarlos con sus tesis de licenciatura y posgrado.

“Una de mis grandes satisfacciones es ver que a todos los egresados que apoyé les ha ido muy bien, hay profesores, investigadores, empresarios, algunos están en puestos administrativos. Estoy muy orgullosa, y como académica estoy satisfecha de lo que hice, hasta cierto punto, porque siempre se puede hacer más”, confesó.

Dentro de su trayectoria en la Universidad de Sonora participó en la formación del DIPA y en la implementación de los planes de estudio de la maestría y doctorado. Durante este tiempo nunca ocupó un cargo administrativo, como ella misma dice “fue soldado raso” e hizo aportes desde esa trinchera.

Dijo que se enteró de la figura de Profesor Investigador Honorario por el jefe del DIPA, quien junto con el director de División defendieron su solicitud ante el Colegio Académico.

“Me parece muy apropiado que se propongan este tipo de incentivos, porque hay maestros que necesitan jubilarse pero que tienen experiencia y pueden seguir apoyando a la Universidad en actividades específicas y en tiempos reducidos, ya no con todas las responsabilidades que tiene el ser profesor investigador de tiempo completo”.

Aunque declaró estar muy contenta de seguir colaborando a través de este programa, también dijo que ya está haciendo y aprendiendo otras cosas externas a la alma mater.

Derivado del trabajo en la Universidad señaló que hay un campo que le gustaría explorar: escribir sus experiencias en el acompañamiento del estudiante, en su formación.

“Es algo que he estado pensando y creo que puedo escribir acerca de lo interesante que es la actividad, la formación como investigador del estudiante de posgrado, así como el acompañamiento en la generación de conocimiento y su publicación.

¿Quién puede obtener este nombramiento?

En enero de 2019 se publicó una Gaceta edición especial con la definición, procedimiento y criterios para el nombramiento de Profesor Investigador Honorario de la Universidad de Sonora, en ella se establece que es aquel académico jubilado de la institución, o externo a la misma, a quien, por su reconocida trayectoria, alta productividad y contribución significativa en el desarrollo institucional se le confiere este reconocimiento especial.

La Universidad de Sonora, por acuerdo del Colegio Académico, otorga este nombramiento temporal para que desarrolle actividades de colaboración con un alto potencial de impacto en la docencia, investigación en la frontera del conocimiento, innovación y transferencia de tecnología, así como en la cooperación internacional en áreas estratégicas para el desarrollo de la institución.

Entre los requisitos para obtenerlo, los aspirantes deben ser profesores jubilados de la institución, con grado de doctor, categoría de titular y ser miembro del Sistema Nacional de Investigadores, entre otros.

Y en el caso de los externos, tener al menos diez años de experiencia en instituciones de educación superior o centros de investigación de alto prestigio, así como autorización, en su caso, de la institución donde labora en forma permanente para colaborar como Profesor Investigador Honorario en la Universidad de Sonora.

El reconocimiento de Profesor Investigador Honorario será de carácter temporal, con una duración de hasta un año.  Para proyectos estratégicos de alto impacto y largo aliento, el reconocimiento de profesores externos como profesores investigadores Honorarios podrá ser hasta por tres años.

Como parte de sus actividades de colaboración con la Universidad de Sonora, el Profesor Investigador Honorario deberá participar en publicaciones de nivel internacional y desarrollar al menos dos de las siguientes actividades, las cuales deben incluirse en el plan de trabajo: Dirigir y/o codirigir estudiantes, principalmente de posgrado; impartir asignaturas en programas de licenciatura o posgrado, o participar en Comités Tutoriales de los alumnos de Posgrado.