Desde estudiante me interesó la docencia y la investigación: Lidia Amalia Zallas Esquer

29 de julio de 2021


Olivia Paredes

La vinculación que la Universidad de Sonora mantiene desde sus inicios con otras instituciones educativas y centros de investigación favoreció para que Lidia Amalia Zallas Esquer confirmara que la docencia y la investigación serían su futuro desde que ingresó a la Unidad Regional Sur (URS) como estudiante, en 1980.

Su primera experiencia, relató, ocurrió cuando cursaba los primeros semestres de la Licenciatura en Sociología y asistió a un evento organizado por la Coalición de Ejidos Colectivos de los Valles del Yaqui y Mayo, en el que participaron campesinos, estudiantes, docentes e investigadores.

“Cuando ingrese era una educación muy tradicionalista y memorística, las clases se desarrollaban en un ambiente de respeto y cordialidad, existía escasa infraestructura y aulas prefabricadas donde se pasaba mucho frío en invierno y mucho calor en verano; se asistía a clases con entusiasmo y muchos sueños que cumplir, y como las carreras no eran terminales, los estudiantes se tenían que trasladar a Hermosillo a concluir sus estudios, como fue mi caso.

“Desde la época de estudiante me interese por la docencia y la investigación. Mi primera experiencia fue en la materia de Sociología Rural, cuando asistimos a un evento organizado por la Coalición de Ejidos Colectivos de los Valles del Yaqui y Mayo; desde ese momento decidí realizar mi tesis de licenciatura referente a esa organización”, precisó.

La actual jefa del Departamento de Ciencias Sociales en el campus Navojoa expresó que debido a la vinculación, la Universidad de Chapingo emitió una invitación para que alumnos de su institución y la Universidad de Sonora realizaran una investigación conjunta sobre los ejidos colectivos.

“Tuve la suerte de que se me comisionara, fue una experiencia muy buena trabajar y compartir con estudiantes de esa institución; posteriormente, me siguieron invitando a participar, se me facilitaba por la cercanía del domicilio de mi familia, que me permitía ir y venir a Ciudad Obregón, esa experiencia en investigación, y con el apoyo de los profesores, tiempo después me permitió titularme”, narró.

Zallas Esquer detalló que al terminar su carrera profesional se le presentó la oportunidad de laborar en su propia casa de estudios: la Unidad Regional Sur, lo que la llenó de gusto, al igual que a sus padres, quienes fueron testigos del esfuerzo, dedicación y empeño que ponía a su investigación.

“Cuando inicié mis labores en la URS, ya se habían hecho algunos cambios: los estudiantes ya tenían una mayor participación en la toma de decisiones, hubo un aumento en la matrícula e incorporación de profesores jóvenes, y tuve la oportunidad de ingresar como docente; a finales de los años ochenta y noventa fueron años de mucho dinamismo, mejoramiento de la infraestructura, participación activa de docentes y estudiantes con propuestas en los órganos de gobierno.

“Desde que ingresé participé en diversos eventos, conjuntamente con otros profesores interesados en las problemáticas de la región; se impulsó la vinculación con sectores de la sociedad, se discutían

y analizaban mediante paneles, foros, mesas redondas sobre problemas que aquejaban en ese momento y también se da la preocupación de los docentes para una mayor preparación y actualización”, puntualizó.

En su estadía en el campus Navojoa como parte de la planta docente, Lidia Amalia ha sido testigo del crecimiento de la institución, tanto en los cambios que ha tenido el proceso enseñanza-aprendizaje, como en cuestión de infraestructura y avances tecnológicos.

“Durante la primera década del 2000, fueron años de crecimiento, aumento de matrícula y se mejoró la infraestructura, se construyó un edificio moderno con oficinas, una amplia biblioteca y aumentó considerablemente el número de computadoras; mientras que para la segunda década, ya la mayor parte de los docentes contaba con estudios de maestría y doctorado, y había un mayor uso de la tecnología”, describió.

Aunque ya había tenido un acercamiento a la investigación educativa al llevar una especialización en planeación, desarrollo y evaluación de la práctica docente, y participar en diversos talleres sobre metodología de la investigación apoyando a tesistas, fue en 1990 cuando la académica estudió la Maestría en Administración, la cual le permitió acercarse a temas como gestión y administración educativa, y transparencia.

“Al ingresar al Doctorado en Educación me centré más en estudiar sobre la labor docente, y en los últimos años me he interesado en temas sobre gobernanza y sustentabilidad; la vinculación de la URS con otras instituciones me ha favorecido para participar de manera conjunta con otros investigadores en trabajo colaborativo, que permite tener visiones más claras y propuestas de manera multidisciplinaria”, subrayó.

Actualmente, enfatizó, el uso de la tecnología ha jugado un papel muy importante en la investigación y la impartición de las clases, pues con la llegada de la covid-19 las universidades tuvieron que dar una respuesta necesaria a través del uso de herramientas digitales para no cancelar la labor docente.

“Un reto en educación ha sido la migración a la modalidad virtual aprovechando los recursos multimedia para el aprendizaje; antes era muy complicado ver una clase grabada, hoy en día hay una aceptación por parte de las personas, la videollamada es un mecanismo muy aceptado por los universitarios y existe mucho contenido digital con enfoque científico.

“Mucha gente está siendo más accesible a estos contenidos científicos y hay un reconocimiento a los autores mediante licenciamiento creativo abierto; eso ha hecho que haya más creadores de contenido científico”, acentuó.

Lidia Amalia Zallas Esquer enlistó que ser docente le ha permitido vincular su quehacer en el aula con la investigación, tener la oportunidad de trabajar en licenciatura y posgrado, ser ponente nacional e internacional, publicar artículos en revistas nacionales e internacionales, publicar capítulos de libros, ser miembro del comité editorial de la Revista de Investigación Académica sin Frontera y formar parte de los órganos colegiados de la URS.

“El 2020, a partir de pláticas que impartió la Dirección de Investigación y Posgrado me interesé en participar en el concurso de selección convocado por el Sistema Nacional de Investigadores (SNI), y fui aceptada en la categoría de candidato por un periodo de cuatro años”, concluyó.