Prevalece la cultura de una sociedad patriarcal, asegura académica

18 de marzo de 2015


Aunque muchos lo niegan, la sociedad patriarcal sigue intacta --aunque transformada-- en la mayor parte de México y también en el resto del mundo, afirmó Maren Von Der Borch, académica del Departamento de Trabajo Social en la mesa redonda “Mujeres del saber”, organizada recientemente por el Archivo Histórico de la Universidad de Sonora.

En su intervención señaló que muchos alegan que la globalización/neoliberalismo, con su enorme poder económico, político y simbólico, ha dado al traste con el de las mayorías, tanto de hombres como mujeres, y sostuvo que por más cierto que esto sea, no cabe duda que prevalece una cultura en la que se considera al ser femenino como inferior en relación con el hombre.

“Basta con observar algo que puede parecer trivial, pero no lo es: la manera en cómo agentes totalmente ajenos a la búsqueda de una cultura de equidad y no discriminación se apropiaron del Día Internacional de la Mujer, no sólo en Hermosillo, sino en muchas partes del país y del mundo --medios informativos, y redes sociales como Facebook-- con mensajes comerciales, felicitaciones flores, regalos”, advirtió en la Sala de Exposiciones del Archivo Histórico.

Olvidaron, añadió, que la fecha es de conmemoración, no de celebración, de la muerte de más de 40 jóvenes trabajadoras --la mayoría, inmigrantes italianas y judías-- en el incendio de la fábrica donde laboraban en la ciudad de Nueva York.

Dijo que tan lamentable hecho, ocurrido el 25 de marzo de 1911, trajo grandes repercusiones en la legislación laboral de Estados Unidos y después en otros países, lo cual generó que en diferentes fechas comenzara a instaurarse el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, primero, y luego de la Mujer.

Von Der Borch citó que la definición del 8 de marzo ocurrió mucho tiempo después (1975), coincidiendo con el Año Internacional de la Mujer de las Naciones Unidas, fecha que tiene que ver con la historia de mujeres rusas que en 1917, como reacción ante los dos millones de soldados de su país muertos en la I Guerra Mundial, escogieron el último domingo de cada febrero para declararse en huelga en demanda de “paz y pan”.

Cuatro días después, agregó, el Zar Nicolás II se vio obligado a abdicar, y el gobierno provisional concedió a las mujeres el derecho de voto. “Este “histórico domingo” fue el 23 de febrero, según el Calendario Juliano, utilizado en Rusia, o el 8 de marzo, según el Gregoriano, que se usa en otras naciones”, apuntó.

Consideró que todavía estamos muy lejos de una cultura de equidad/no discriminación, ya que prevalecen ciertos criterios machistas, sin dejar de reconocer que en el caso de nuestra casa de estudios se estén dando pasos firmes a través de programas y acciones específicas de género.

Por ello, planteó que como reforzamiento a ese objetivo propone cinco grandes objetivos sobre el tema: lucha contra la sociedad patriarcal, diferenciar la violencia femenina y masculina, insistir en la igualdad de derechos y oportunidades, y dejar un lado el “victimismo” porque es un discurso que despolitiza y desmoviliza; construir comunidades, redes y lazos en todos los ámbitos, y cuestionar el propio ejercicio del poder de la mujer, especialmente hacia los hijos y alumnos. (JAR)