El consumo de drogas puede convertirse en trastorno crónico y recurrente: Elisa Espinosa

14 de junio de 2022


Jesús Alberto Rubio

El consumo de drogas representa un problema de salud pública en México y no es ajeno a estudiantes en sus distintos niveles, de ahí que se desarrollen diversos programas de prevención contra ese mal que puede convertirse en un trastorno crónico y recurrente, afirmó Elisa Espinosa Enríquez, docente del Departamento de Psicología y Ciencias de la Comunicación (Psicom) de la Universidad de Sonora.

La académica señaló que se sabe cómo estudiantes de nivel universitario consumen drogas de diversos tipos, entre ellas las psicoactivas tanto legales como ilegales. Al respecto, mencionó el alcohol, tabaco, marihuana, fentanilo, opiáceos, anfetaminas, metanfetamina como el cristal, entre otras.

Indicó que los efectos del uso de drogas a corto o inmediato plazo está el relajar, tranquilizar, sedar o en su defecto estimular y por lo tanto provocar una sensación de tener más energía, mantenerse más despierto, o incluso llegar a tener alucinaciones.

“El uso de estas drogas trae consecuencias desgastantes en la vida de las personas que las consumen como de quienes les rodean, debido a la incomprensión de ambas partes, comenzando por la negación y minimización que tienen con relación a su consumo, dificultad para aceptar que tienen un problema en el uso y en los efectos que producen”, dijo.

Además, Espinosa Enríquez señaló que entre sus pares tienden a verlo como algo normal.

“Es bien sabido que algunos de los consumidores comienzan a tener contacto y uso de drogas por el hecho de querer pertenecer a un grupo social, sentirse incluidos o parte de ellos”, advirtió.

Enseguida, informó que entre las principales afectaciones visibles en el aspecto físico son las pérdidas o deterioro dentales, enfermedades periodontales, bajo peso, resequedad de piel, sequedad en la boca, enfermedades respiratorias, problemas cardiovasculares, enfermedades hepáticas, adicción, trastornos psicológicos, etc. hasta producir la muerte.

Alteración del cerebro
La académica de Psicom indicó que existen investigaciones donde se ha observado que el cerebro de las personas que consumen drogas se ven alterados en la sustancia gris y blanca; “la primera, tiene relación con los sentidos, es decir la percepción; a su vez también con la memoria, la autorregulación y las emociones, entre otros”.

Ambas, afirmó, tienen la función de analizar y transmitir la información que se da en el cerebro, por lo que si se ven afectadas trae como consecuencia un déficit o deterioro cognitivo.

Dijo que entre los principales efectos que se pueden observar al consumir drogas psicoactivas, se encuentran la dificultad en la atención y coordinación, alteraciones en la memoria, insomnio, déficit en su inteligencia emocional, poca o nula asertividad en la toma de decisiones, así como dificultad en el aprendizaje y por ende bajo rendimiento escolar.

“Con esto último nos referimos a acciones que desencadenarán bajas calificaciones o calificaciones no aprobatorias y que llegan a afectar incluso hasta la deserción escolar, tales como las constantes faltas a clases, los problemas conductuales que se pueden generar tanto dentro como fuera del aula, menos tiempo de dedicación a las tareas y al estudio, incumplimiento de tareas, deterioro social con sus compañeros y compañeras, incluso con los docentes, así como con sus familiares”, abundó.

Recordó que desde hace algunos años se ha considerado también a las y los estudiantes universitarios como población vulnerable en el consumo de drogas debido a la edad, a las nuevas solicitudes y demandas académicas y de sus pares, entre otros.

Surge entonces así, sostuvo, un proceso de ajuste y adaptación a la vida universitaria, viéndose afectados aquellas personas que poseen menor cantidad de factores protectores como autoestima, seguridad, habilidades sociales, comunicación asertiva, redes de apoyo.
Por lo anterior, puntualizó, es importante desarrollar y trabajar también en la etapa universitaria con programas que brinden factores protectores de prevención en el consumo de drogas.

Programas pertinentes
Elisa Espinosa informó que la Universidad de Sonora tiene algunos programas que fungen como factores protectores ante esta situación, entre ellos, el de tutorías donde docentes que han sido preparados y capacitados para acompañar al estudiante durante su trayecto de formación profesional universitario puede orientar, dirigir y/o canalizar a su tutorado/a a las instancias pertinentes ante situaciones como ésas.

Además, agregó, se tiene también en la Dirección de Apoyo a Estudiantes el Programa Institucional de Bienestar Psicológico, donde estudiantes de la Universidad pueden acudir a solicitar orientación y respaldo, así como el Centro de Atención Telefónica de Intervención en Crisis (Catic).
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