Docentes del deporte Unison apoyan la salud de los internos del Cereso I de Hermosillo

13 de junio de 2022


Jesús Alberto Rubio

En coordinación con la Academia de Cuidado y Mantenimiento de la Salud a través de la actividad física y el movimiento, el Departamento de Ciencias del Deporte y de la Actividad Física de la Universidad de Sonora, se ha dado a la tarea de realizar una serie de actividades que favorezcan la salud de los internos en el Centro de Reinserción Social (Cereso) 1 de Hermosillo.

Ena Monserrat Romero Pérez, académica de la Licenciatura en Cultura Física y Deporte, destacó que una de las líneas de la Academia se orienta precisamente a la generación y aplicación del conocimiento en la atención del adulto mayor, en este caso, aplicable en ese centro de reinserción social.

Planteó que en una población de adultos mayores que se encuentra en reclusión, la restricción de movimiento, la inactividad, en sí, la vida sedentaria, son algunos de los factores que influyen y causan un deterioro físico que favorece la presencia de enfermedades y de estados de discapacidad.

Informó que incluso, para estrechar aún más el vínculo entre la Universidad de Sonora con un sector vulnerable de la sociedad, como es la población reclusa mayor de 60 años, se convocó a maestros y alumnos del Programa de Licenciatura en Cultura Física y Deporte para que colaboraran con la donación de artículos de cuidado e higiene personal, de limpieza y alimentos no perecederos.

Lo recabado, dijo, fue recibido por el director del Centro Penitenciario, Edgar Iván Morales Ruiz, de mano de ella y el profesor Néstor Antonio Camberos Castañeda.

Programa de ejercicio físico
Dio a conocer que en el Cereso trabajan en la evaluación de la capacidad funcional, composición corporal y fuerza de los adultos mayores, además de impulsar un programa de ejercicio físico con el propósito de mejorar sus indicadores de salud y su condición física en general.

“Estas acciones se fundamentan en el hecho de que el envejecimiento es un proceso progresivo intrínseco que forma parte del ciclo biológico natural que acontece en todo ser vivo con el paso de los años”, expresó la doctora en Ciencias de la Actividad Física.
Romero Pérez señaló que la funcionalidad física del adulto mayor constituye la suma de capacidades para realizar por sí mismo actividades indispensables para satisfacer sus necesidades.

La dependencia de cualquiera de las actividades básicas e instrumentales de la vida diaria, advirtió, se relaciona con aumento en la mortalidad de los adultos mayores.
“Los procesos degenerativos ligados a la edad y la morbilidad son las dos principales causas de discapacidad entre la población adulta mayor teniéndose que aproximadamente ocho de cada 10 casos de discapacidad se relacionan con edad avanzada y enfermedad”, añadió.

Calidad de vida
Ena Monserrat Romero dijo que la calidad de vida tiende a ser menor conforme las personas envejecen, y depende en gran medida de la capacidad para llevar a cabo las actividades básicas de la vida diaria, las cuales proporcionan al individuo independencia física y funcional. El deterioro orgánico y funcional del envejecimiento, sostuvo, tiene repercusión en todos los sistemas.

“En el aparato locomotor, la pérdida de masa ósea (osteopenia), el deterioro muscular (sarcopenia) y la degeneración articular (osteoartritis) producen un decremento de las capacidades físicas incrementando el riesgo de caídas y fracturas.”, indicó.

Planteó que en una población de adultos mayores que se encuentra en reclusión, la restricción de movimiento, la inactividad, en sí, la vida sedentaria, son algunos de los factores que influyen y causan un deterioro físico que favorece la presencia de enfermedades y de estados de discapacidad.

Ena Monserrat Romero adelantó que en la segunda quincena del mes de agosto próximo estarán reanudando la atención a sobrevivientes de cáncer de mama con el programa de entrenamiento muscular, que han venido desarrollando desde 2014.